martes, 26 de mayo de 2020

Ano de 1862. “Don PEPITO” O último CIRURXIÁN de Salceda



Na Idade Media existía unha peculiar profesión denominada “cirurxián-barbeiro”, un oficio tan dispar que servía tanto para un roto como para un descosido, o mesmo facían sangrías, extraían moas, entablillaban unha perna, reparaban unha hernia, recortaban unha perilla, perfilaban unha patilla ou definían un bigote.

Na vertente sanitaria do oficio os remedios adoitaban ser traumáticos, igual facían unha trepanación para curar unha dor de cabeza, pois se pensaba que perforar o cranio aliviaba a presión sobre o cerebro, causante da dor de cabeza ou da tolemia, como facían amputacións dalgún membro se o vían necesario.

Pero o servizo estrela que practicaban era a flebotomía ou “sangría”, un remedio que servía para curar enfermidades eliminando o sangue viciado, e tamén se practicaba con carácter preventivo, na primavera era común que a xente acudise a facerse unha sangría para extraer o exceso de sangue e así equilibrar os humores do corpo.



Sangría


O proceso consistía en mergullar o brazo en auga quente para resaltar as veas, logo facíaselle apertar fortemente un pau redondo para que as veas inchásense e o sangue fluíse mellor, a continuación o cirurxián practicaba un corte e o sangue brotaba caendo nun recipiente chamado sangradeira ou en ocasións tamén se utilizaba a “bacía”, que era un utensilio do barbeiro consistente nun recipiente para aplicar a escuma para o afeitado, e que fixo famoso “don Quijote” utilizándoo como helmo.


bacia de barbeiro


O pau sobre o que se agarraban os pacientes era de cor vermella porque estaba manchado de sangue. Cando o cirurxián non estaba a prestar servizo, colgaba o pau na porta cara a rúa envolto a intervalos oblicuos cunha tea branca, como a que usaba para vendar os brazos sangrados. Este costume de colgar este poste branco e vermello na porta do local acabou sendo o aceno das barberías e converteuse no símbolo do gremio de barbeiros-cirurxiáns, que aínda hoxe utilizan as barberías.


Poste de barbeiro


No ano de 1720 chegou a Salceda unha Real Orde que obrigaba aos responsables dos partidos xudiciais a velar que os profesionais sanitarios estivesen debidamente titulados, para iso obrigouse a que mostrasen os títulos:




“ … los sujetos que usan de la profesión de médicos y zirujanos, boticarios y barberos sin estar examinados ni aprovados siguiendose grave perjuicio de lo referido a mandado que los correxidores de las cavezas de partido no permitan que exerzan las referidas profesiones ...”


A partir de entón queda constancia nas actas locais as exhibicións dos títulos:



Exhibicion de título:
En la villa de Santa Maria de Salceda caveza de partido a seis dias del mes de agosto y año de mil sietecientos y veinte delante de su merced Domingo Gonzalez juez hordinario de la dicha villa cabeza de partido y en presencia de escribano, Salvador Alonso vezino de la feligresia de San Martin de Caldelas exivio el titulo de zirujano firmado por Pedro de Agenta y Juan de Lopez médicos de la Cámara de su magestad (…) Con mas exivio el de barbero y sangrador aprovado por Don Juan Bouzas (…)


En la dicha villa de Santa Maria de Salceda a seis dias del mes de agosto de mil sietecientos y veinte delante de su merced Domingo Gonzalez juez hordinario en presencia de mi escribano pareció Don Francisco de Vrga. Araujo vezino desta dicha villa y exivio un título de Boticario a su favor despachado delante de tal boticario firmado según parece de Don Juan de Lope médico de la Camara de su Magestad (…)

Francisco Xabier exibio el titulo de barbero sangrador flebotomiano, Juaquin Pra. Sangrador flebotomiano...


Reproduzo a acta do ano 1790 na que se realiza a exhibición de título de Cirurxián de Manuel Domínguez de Castro veciño de Salceda. Aínda non se inventaran as fotografías nesas datas, e para a identificación persoal menciónase no título una breve descrición física do beneficiario.


Señores Justicia y Regimiento
Don Manuel Dominguez de Castro, vecino de esta villa ante V.M. como mas haya lugar digo que yo soy facultativo y profeso en el Arte de Cirugia de cuya amprobación exibo el correspondiente titulo, y a fin de que a todo tiempo conste y que ninguno pueda ponerme impedimento en el uso de dicha facultad, suplico a V.M. que en vista de la referida carta de aprobacion, se sirva haberla por exivida, y mandar que el presente escribano la traslade a comunicación del Decreto que se sirva proveer, y en manera que haga fe, la coloque en el Legajo de acuerdos y asuntos de concejo del corriente año, debolviendome el titulo original con la nota de haberlo exivido, para los efectos que me combengan, según es de Justicia que pido y Juro lo necesario. Manuel Dominguez y Castro.

Testimonio. En cumplimiento y obedecimiento del Decreto antecedente que obedezco y venero como devo, yo Francisco Antonio Davila escribano de S.M. que sirvo el numero y Ayuntamiento en esta villa de Santa Maria de Salceda y su Real Jurisdicion, caveza de partido, compulso aquí a la letra el Titulo exivido, que su tenor es como sigue:
Nos los Licenciados Don Pedro Custodio Gutierrez primer Cirujano del Rey nuestro Señor Proto Cirujano, Don Jorge Martin Cavallero y Don Antonio Ginbernat, Alcaldes examinadores y Jueces mayores, en todos los Reynos y Señorios de su Magestad, de los Cirujanos y Sangradores y las demas partes y cosas pertenecientes a la facultad de Cirujia. Mediante que Manuel Dominguez de Castro, natural de la villa y Jurisdición de Salceda, Provincia y Diocesis de Tuy, que es un hombre de regular estatura, flaco y trigueño de cara, nariz afilada, pelo barba y cejas negro, y ojos pardos; ha sido examinado y aprobado en la facultad de Cirujia y Algebra por la subdelegacion que tenemos establecida en la Ciudad de la Coruña, en los dias veinte y veinte y uno de Julio proximo pasado de este año, y de que en ella prestó Juramento de defender el misterio de la purísima concepcion de la Virgen Maria nuestra señora, usar bien y fielmente dicha facultad; ofreciendo tambien asistir a los pobres de limosna. En esta inteligencia, damos licencia y facultad cumplida al dicho Manuel Dominguez de Castro para que libremente, sin pena ni calumnia alguna, pueda usar y egercer la expresada facultad de Cirujia y Algebra y los casos y cosas a ella tocantes y concernientes en todas las Ciudades Villas y Lugares de los Reynos y Señorios de su Magestad con que para las evacuaciones y otras cosas necesarias en los casos de dicha profesion, llame Medico acompañado habiendole en el Pueblo, y que para sangrar por si obtenga el titulo de Sangrador que hasta ahora no ha unipetrado, como le precisa para esta operación, sin que las Justicias lo permitan de otra manera; exceptuando los casos violentos de fractura, dislocacion, herida o contusion en que podra sangrar sin incurir en pena. Por tanto de parte del Rey Nuestro Señor exortamos y requerimos a todos y qualesquiera sus Jueces y Justicias, lo degen y consientan usar la referida facultad, sin ponerle impedimento alguno, ni consientan que sobre ello sea vejado ni molestado, solas penas en que incurren los que se entrometen a conocer de Jurisdicion que no tienen y de diez mil maravedies para la camara de su Magestad antes le guarden y hagan guardar todas las honras, gracias, mercedes, franquezas, libertades, prerrogativas e inmunidades que a semejantes facultatibos aprobados suelen y deben ser guardados, haciendo se le paguen qualesquiera maravedies, y otras cosas que por razon de su facultad, le fueren devidos. Y declaramos que el suso dicho ha pagado el derecho de la media annata. Dado en Madrid a veinte y dos de Agosto de mil sietecientos ochenta y un años.pombal Lizenciado Don Pedro Custodio Gutierrez: Lizenciado Jorge Martin Cavallero: Lizenciado Antonio Gimbernat:
Yo Manuel Gorgullo escribano de Rey nuestro Señor y del Tribunal del Real Protomedicato, este Titulo y Lizencia hice escribir de acuerdo de los Señores de el, signe y firme: En testimonio de verdad.
Manuel Gorgullo: Titulo de Cirujano para Manuel Dominguez de Castro, natural de la Villa y Jurisdicion de Salceda, provincia y Diocesis de Tuy.

Concuerda con la carta de titulo exivida, que entregue, tomada la razon al dicho Manuel Dominguez de Castro, a que me remito. Y como tal escribano de S.M. vezino de la villa del Porriño, lo signo y firmo en este pliego entero de papel sello primero, estando en dicha Salceda a veinte y uno de Junio año de mil sietecientos nobenta. En testimonio de verdad. Francisco Antonio Davila.



Co paso do tempo o oficio de cirurxián especializouse e separouse do de barbeiro, e a partir do século XIX profesionalizouse en varias disciplinas:  odontólogo, cirurxiáns, practicantes, etc.

Entre finais do século XIX e primeiros do XX, tiña a consulta no barrio de Altamira, onde comeza a entrada ao barrio de Pegullal, o derradeiro “cirurxián” de Salceda “Don Pepito”.

Cirurxián e tamén menciñeiro, un oficio milenario que xogou un papel fundamental na saúde dos habitantes da Galicia rural, atentos observadores da natureza que usaban menciñas naturais e antiquísimos remedios transmitidos de xeración en xeración.

Empregaban secretos curativos tradicionais e milenarias receitas que están hoxe perdidas na súa maior parte, que complementaban e competían coa medicina académica que ata finais do século XIX, aínda estaba por despegar.

José Angel “Don Pepito” Núñez Rodríguez, tiña o cargo de Practicante, pero era coñecido có termo que desde antergo se empregaba para estas persoas “o Cirurxián”.



-¿Que recuerdo guarda usted de aquellas fiestas?
-Una “pandiga” (merienda) que hicimos por el año 1885. Eramos ocho mozos y ocho mozas. Compramos un calabazo de vino en el “Carro de Gerardo”, por un real, dos roscas que fueron muy caras, a trece reales cada una, y las mozas pusieron rosquillas “das gordas”, que valían a “perro grande” la docena. La novia que me acompañaba era Rosina de Xan Piñeiro de San Jorge, que después me traicionó casándose más tarde con el cirujano don José Núñez.
El Pueblo Gallego. 1 de agosto de 1964. Entrevista con D. Juan Antonio Sanjuan Araujo.




Aínda que nestes anos existía en Salceda a praza de médico, ocupada por un médico titulado, a saúde era un servizo de pago para os pacientes, salvo para unha cota reducida de “pobres sen recursos” asignado polo concello, para os cales estaba obrigado o médico titular a prestarlle unhas atencións mínimas sen cargo. 

En moitas ocasións os veciños, por non poder pagar os honorarios do médico, por non estar este dispoñible xa que tamén atendía outros municipios, non ser resolutivo, ou non poder pagar as menciñas que se lle ían receitar, acudían á consulta de Don Pepito que non sendo médico titulado, ademais das propias atencións de enfermería e extralimitándose en ocasións da súa función, exercía a medicina con gran aprecio e recoñecemento na veciñanza.

A principios do século XX, cos enormes avances na medicina e a chegada a Salceda dun novo médico titular e titulado, don Jacinto Zunzunegui a situación cambiou, xa non tiña cabida este tipo de prácticas, e Don Pepito foi denunciado en varias ocasións por intrusismo profesional.




Fueron denunciados al Sr. Gobernador los vecinos de Salceda, José Núñez y Manuel Fernández, por ejercicio ilegal de la medicina en varias parroquias de aquel distrito.
La Correspondencia Gallega. Diario de Pontevedra. 01 de febrero de 1901








Intruso en Medicina
Por el Subdelegado de Medicina del partido de Tuy, ha sido denunciado al Juzgado por intruso en el ejercicio de la medicina, el Practicante D. José Núñez, vecino de Salceda, el cual se dedicaba a curar enfermos de viruela.
La Correspondencia Gallega. Diario de Pontevedra. Nº 3856. 26 de noviembre de 1902






Ha sido denunciado al Juzgado municipal de Tuy, el Practicante de medicina, D. José Núñez, vecino de Salceda, por dedicarse a curar enfermos de viruela en algunas parroquias de aquel distrito.
El Eco de Galicia nº 403. 30 de diciembre de 1902




Posiblemente como consecuencias da denuncia, Don Pepito foi destituído da praza de practicante:




La Alcaldía de Salceda tambien anuncia la plaza vacante de practicante de dicho distrito dotada con el sueldo anual de 75 pesetas.
La Correspondencia Gallega. Diario de Pontevedra. Nº 3870. 13 de diciembre de 1902




Pero, non debeu tardar en recuperala, xa que en anos posteriores continuou exercendo como practicante, así como tamén volveu a ser sancionado por intrusismo:





El practicante del Ayuntamiento de Salceda D. José Núñez hizo ayer efectiva en la alcaldía de esta ciudad, en papel de pagos al Estado, la multa de cincuenta pesetas que le había sido impuesta por la misma, en virtud de acuerdo recaido en sesión celebrada por la Junta local de Sanidad el pasado día 21, por infracción del artículo 64 de la Instrucción de Sanidad.
La Integridad. 26 de abril de 1921




Nese mesmo ano, á idade de 59 anos, o 21 de novembro de 1921 finou don Pepito.




NECROLÓGICA
A causa de un ataque cerebral, ha dejado de existir en esta villa el competente y acreditado practicante, D. José Núñez Rodríguez, cuyo sepelio ha tenido lugar el día 22 de noviembre último.
Con tal motivo vimos desfilar entre nosotros infinidad de personas de toda esta comarca que corrían en bandadas a rendir el postrer tributo al médico de los pobres, haciendo que su entierro resultase una impresionante manifestación de duelo.
Reciba su muy estimada familia la expresión más sincera de nuestro cordial sentimiento.
El Tea: semanario independiente: Época 2ª Año XVI Número 358 - 1921 diciembre 3





Mostramos unhas breves pinceladas sobre a súa orixe: José Núñez e Francisca Filgueira eran veciños da parroquia de Cabreira en Salvaterra de Miño, foron pais de Juan Antonio Núñez Filgueira.

Juan Antonio Núñez Filgueira, naceu no ano 1828, casou con María Concepción Rodríguez González e viviron en Salceda, no barrio da Esfarrapada. Juan Antonio finou o 4 de agosto de 1896 aos 68 anos. 

Deste matrimonio naceu no ano 1862 un fillo chamado José Angel Núñez Rodríguez que foi o citado “Don Pepito o cirurxián”, e outros fillos do matrimonio tamén foron María Gumersinda e Manuel Núñez Rodríguez, quen exerceu de sacerdote na parroquia de A Picoña.






En seis de abril de mil ochocientos y sesenta y cinco yo D. Mauricio Estevez Troncoso abad parroco de esta villa, de Santa Maria de Salceda su anejo San Pedro de Arantey, obispado de Tuy, provincia de Pontevedra bauticé solemnemente una niña que nacio el dia cuatro de dicho mes, a las doce de la noche en el lugar de Esfarrapada, casa sin numero, pusele nombre Maria Gumersinda es hija legitima de Juan Antonio Nuñez natural de Cabreira y Maria Concepcion Rodriguez de esta parroquia, abuelos paternos Jose Antonio Nuñez y Francisca Filgueira difuntos naturales de la citada Cabreira, maternos Manuel Rodriguez y Maria Antonia Gonzalez difuntos naturales de esta parroquia todos son labradores de oficio, fueron sus padrinos Manuel Gonzalez casado y Ramona Nuñez soltera de Cabreira a quienes adverti el parentesco espiritual y obligaciones para que conste lo firmo ut supra. Mauricio Estevez.

Libro de bautizados de Santa María de Salceda. Arquivo Histórico Diocesano Tui-Vigo






José Angel “Don Pepito” Núñez Rodríguez casou con Rosa Piñeiro Lemos, ela era natural de San Xurxo de Salceda, nacida no ano 1865.



Rosa Piñeiro Lemos


Don Pepito e Rosa tiveron cando menos once fillos:

-     Aurora Núñez Piñeiro, nacida en 1886 e finada en 1940, casou con Juan Fructuoso Vaqueiro, tiveron catro fillos, Luis, Rosa, Manuel e Francisco.

-      Manuel Núñez Piñeiro, nacido en 1890 e finado en 1950, casou con Saladina Barros, tiveron oito fillos, Cesar, Purificación, Rosa, Manuel, Milagros, Enrique, Lala e Arturo.

-   Olegario Núñez Piñeiro, nacido en 1898 e finado en 1951 en Brasil, casou con Carmen Fernandez Quintel.

-   Florencio Núñez Piñeiro, nacido en 1900 e finado en 1972 en Brasil, casou con Concepción Fernández Soto.

-       Francisco Núñez Piñeiro, nacido en 1892

-       Delfina Núñez Piñeiro, nacida en 1894

-       Purificación Núñez Piñeiro, nacida en 1896

-       Carmen Núñez Piñeiro, nacida en 1902

-       José María Núñez Piñeiro, nacido en 1904

-      Elena Núñez Piñeiro, nacida en 1906 e finada en 1990, casou con Maximino Barros Cabaleiro.


En la parroquial de Santamaría de Salceda unieron su suerte ante el altar, la joven Venancia Pérez Ríos, de Salceda, con el joven Juan Troncoso Suárez, del Barrio de Pigullal, y la joven Elena Núñez de Piñeiro, de Salceda, con el joven Maximino Barros, de Parderrubias.
El Correo de Galicia. Domingo 8 de Abril de 1928




-       Rosa Núñez Piñeiro, nacida en 1908 finou con 9 anos o 22 de agosto de 1917.


Don Pepito faleceu o 22 de novembro de 1921 á idade de 59 anos. Seu fillo Manuel Núñez Piñeiro, seguiu a profesión do seu pai e tamén foi Practicante, tendo a súa consulta no barrio de Altamira preto da casa paterna.

Centramos agora a atención ao matrimonio producido có casamento da filla primoxénita Aurora Núñez Piñeiro con Fructuoso Vaqueiro García:



Árbore xenealóxica



No lugar do Cruceiro, viviron a finais do século XIX o matrimonio formado por Francisco Vaqueiro Fernández (fillo de Juan Antonio Vaqueiro Fernández e María Francisca Fernández Suárez) e Antonia García Vaqueiro (filla de Juan Manuel García Estévez e María Benita Vaqueiro Ojea).

Francisco e Antonia tiveron catro fillos:


-     Josefa Vaqueiro García, nacida en 1876 morreu no ano 1950, casou con Saturnino Lemos Fernández,

-        Emilio Vaqueiro García, nacido no ano 1878 e finou con 12 anos o 6 de decembro de 1890,

-        Juan Fructuoso Vaqueiro García, nacido en 1883, casado con Aurora Núñez Piñeiro, finou en 1941,

-   Luis Vaqueiro García, naceu no ano 1884, casou no ano 1911 con Esperanza Fernández Juste filla de Joaquín Fernández e Perfecta Juste. Luis finou o 3 de novembro de 1927,


Antonia finou o 11 de novembro de 1929 e Francisco finou o 28 de marzo de 1930. Antonia tiña un colmado na Feira, barrio do Cruceiro.

O terceiro fillo do matrimonio Juan Fructuoso Vaqueiro García:

Juan Fructuoso Vaqueiro “Fruto da tenda”, naceu no ano 1883, casou con Aurora Núñez Piñeiro, filla de Don Pepito, e viviron no Barral.




En cuatro de enero de mil ochocientos ochenta y tres yo Don Pedro Mendez Martinez, cura parroco de Santa Maria de Salceda municipio del mismo nombre diocesis de Tuy, provincia de Pontevedra bauticé solemnemente a un niño hijo legitimo de Francisco Vaqueiro Fernandez y Antonia Garcia Vaqueiro, naturales y vecinos de esta parroquia de profesion labradores, nacio en el mismo dia a las nueve de la mañana, pusele por nombre Juan Fructuoso, son sus abuelos paternos Juan Antonio Vaqueiro Fernandez, difunto y Maria Francisca Fernandez Suarez, y los maternos Juan Manuel Garcia Estevez y Maria Benita Vaqueiro Ojea difuntos, naturales todos y en sus dias vecinos de esta precisada parroquia, de profesion labradores. Fueron sus padrinos Juan Vaqueiro Fernandez y Josefa Martinez, casados de la misma naturaleza, vecindad y profesión, quienes adverti lo prescrito en el ritual Romano y por ser verdad lo firmo: Pedro Mendez Martinez.
Nota á marxe: Contrajo matrimonio canonico en esta Yglesia de Salceda el dia 17 de octubre de 1914 con Aurora Nuñez Piñeiro, soltera natural de la inmediata de San Jorge y vecina de Salceda. Parroco Carlos Fernandez.
Libro de Bautizados de Santa María de Salceda. Arquivo Diocesano de Tui.






Fructuoso e Aurora


Fructuoso emigrou en tres ocasións a Brasil, onde traballou de cociñeiro entre os anos 1910 e 1920. Foi un home de grandes inquietudes e un dos promotores do asociacionismo agrario desde a diáspora.



Salieron para Rio Janeiro el joven de esta villa Olegario Núñez Piñeiro y nuestro querido correligionario Fructuoso Vaqueiro García. Que la suerte les acompañe y regresen pronto es nuestro deseo.
El Tea. Semanario indenpendiente. 23 noviembre 1919. Año XIII número 278.




Foi un dos socios fundadores e proactivo membro da Sociedad Pro-Federación de Agricultores del distrito de Salceda.






El 25 de mayo celebró sesión la Sociedad Pro-Federación de Agricultores del distrito de Salceda bajo la presidencia de D. José Coto.
La nueva Junta directiva felicitó a la saliente, en la que se destacó el Sr. Fructuoso Vaqueiro quien desde hace tres años viene desarrollando intensa labor dentro de esta sociedad.
La nueva junta quedó constituida en la siguiente forma: Presidente Antonio Nogueira; de Picoña. Vice, Manuel Groba; de idem. Secretario, Celestino González; de Salceda. Vice, Benito Alonso; de idem. Tesorero, José Troncoso Suárez; de idem. Vice, Jesús Rodríguez Martínez; de Parderrubias.
Revisores de cuentas: Maximino Pérez Fernández de Parderrubias y Emilio Alonso Rodríguez, de Salceda.
Vocales; Agustín Alonso, de Salceda; Manuel Pérez, de Parderrubias y Fructuoso Vaqueiro, de Salceda.
El Tea: semanario independiente: Época 2ª Año XVII Número 381. 3 de agosto de 1922.




Fotografía dunha das Xuntas Directivas. Fructuoso Vaqueiro primeiro pola dereita na fila de atrás. Sentado segundo pola dereita está Leopoldo González. 



Fructuoso Vaqueiro e Aurora Núñez casaron o 17 de outubro de 1914. Inicialmente viviron no barrio de Cruceiro convivindo cos pais de Fruto e súa irmá e cuñado. En setembro do 1916 marcharon a vivir á casa propia que construíron no barrio do Barral. Tiveron tres fillos:

-       Luis Vaqueiro Núñez, 1916-1991,

-       Rosa Vaqueiro Núñez, 1917-1993,

-       Manuel Vaqueiro Núñez, 1915-1983,

-       Francisco Vaqueiro Núñez, 1919-1999.

Aurora non emigrou có seu marido, permanecendo en Salceda ao cuidado da facenda e dos fillos. Rexentaba unha taberna-tenda na casa familiar, frente a que hoxe é a casa rectoral no barrio do Barral.

En marzo de 1930 mentras asistía a unha misa na Igrexa Parroquial de Santa María de Salceda, durante unha forte treboada, un raio derrumbou a torre do campanario, e Aurora sufríu graves lesións nunha perna das que nunca se recuperou.





UN RAYO EN UNA IGLESIA
Precisamente cuando los feligreses elevaban sus preces.
Enormes destrozos en el templo.

VIGO 24.- Comunican de Salceda de Caselas que se ha desarrollado allí un suceso que ha causado honda emoción en el vecindario.
Con motivo de las fiestas de San Benito se celebraban oficios religiosos solemnes en la iglesia parroquial, que estaba atestada de gente. Los fieles se hallaban en medio de un gran recogimiento, cuando estalló una formidable tormenta, acompañada de relámpagos y truenos.
El agua caía a torrentes. La tempestad adquiría fuerza, y al sonar un fuerte trueno, dentro del templo se sintió una detonación, seguida de una derrumbamiento terrible. Un rayo había caído sobre la torre y la cúpula de la iglesia, que quedó derribada, y una campana destrozada.
Los feligreses trataron de salir atropelladamente del templo, y se produjo un pánico tan grande que parecía que todos iban a morir aplastados.
Cuando se restableció el orden pudo comprobarse que sólo había algunas personas levemente heridas, a consecuencia de la aglomeración del público.
El Heraldo de Madrid. 24 de marzo de 1930




El Pueblo Gallego. 25.marzo.1930




LOS QUE SE CASAN
Salceda de Caselas. – La señorita Aurea Ferreira Núñez, con el joven don Joaquín Alvarez Rodríguez. Fueron apadrinados por doña Aurora Núñez y don Fruto Vaqueiro.
Vida gallega. Año XXVIII Número 656 – 20 febrero de 1936




Aurora finou o 20 de agosto de 1940 aos 54 anos, e seu marido Fructuoso morreu o 11 de novembro de 1941 aos 59 anos.




En veintiuno e agosto e mil novecientos cuarenta, recibió sepultura cristiana en este cementerio parroquial el cadáver e María Manuela Aurora Vaqueiro García natural y vecina e esta parroquia que falleció el día anterior en el barrio de Altamira, después de haber recibido la extremaunción. Fue funerada con cinco señores sacerdotes incluso el párroco, también se le tuvo el acto de ofrenda con misa cantada y lo demás de costumbre y para que conste lo firmo como párroco. Lic. José Gil Pérez.






En trece de noviembre de mil novecientos cuarenta y uno, recibió sepultura cristiana en este cementerio parroquial el cadáver de Juan Fructuoso Vaqueiro García viudo, hijo de Francisco y Antonia que falleció el día anterior en su casa del Barral, después de haber recibido los santos sacramentos y demás auxilios espirituales. Fue funerado con cuatro sacerdotes incluso el párroco. También se le tuvo acto de ofrenda con misa cantada y lo demás de costumbre y para que conste lo firmo como párroco. José Gil Pérez.